El drenaje linfático, también llamado masaje linfático, es un método de masaje reciente, desarrollado por el doctor Emil Vodder a principios de los 1930’s, que permite la activación de los ganglios linfáticos a lo largo del cuerpo.
La vida sedentaria moderna ha disminuido la eficacia del drenaje linfático natural. Y la presencia de metales pesados en el aire y los agroquímicos, así como las hormonas y los altos niveles de acidez de la industria alimentaria, han sobresaturado nuestro sistema linfático, incapaz de eliminar por sí mismo las toxinas que nuestro cuerpo recibe. |
La Linfa
Cuando este líquido intersticial penetra en el interior de estos minúsculos vasos linfáticos se llama linfa.
La Linfa, es un líquido incoloro y viscoso, su composición es similar al plasma sanguíneo, pero su desplazamiento es más lento que el de la sangre. Su volumen es de un 16% del cuerpo, en una persona de pero y talla normal.
La Linfa se compone de agua, proteínas, grasas, restos celulares y linfocitos.
Los objetivos de la linfa son:
• Alimentar los tejidos
• Reparar
• Fabricar
• Participar en mecanismos de defensa del cuerpo
• Forma parte de todos los tejidos a excepción del nervioso.
Los Ganglios Linfáticos
Los nódulos o ganglios linfáticos tienen forma arriñonada y se sitúan en el trayecto de los vasos linfáticos, su misión es filtrar la Linfa, es decir, captan, atrapan, y destruyen a los microorganismos patológicos invasores.
También son pequeños depósitos de linfa y generadores de linfocitos.
Los ganglios linfáticos colaboran en la dilución o concentración de las proteínas linfáticas, su tamaño es variable.
Técnica del drenaje linfático
El sistema linfático se encuentra justo bajo la piel, por lo que puede ser estimulado con movimientos circulares simples y suaves, en dirección al corazón.
El efecto del masaje linfático debe ser relajante, no profundo, y pocas veces es doloroso. El tratamiento puede limitarse al rostro, pero tiene mejores efectos si se realiza en todo el cuerpo.
La técnica tradicional de masaje linfático se da directamente sobre la piel, y el masajista utiliza sólo sus manos, emulsionadas con algún aceite. La piel se presiona y se estira, pero no se trabaja en los tejidos musculares, por lo que salvo una lesión en la piel o una inflamación de los nodos linfáticos, la sensación debe ser placentera.
El masaje atiende con presión leve zonas importantes del cuerpo donde se ubican los ganglios linfáticos: en las axilas, bajo las clavículas, en el cuello, ingles y rodillas. También manos y pies.
El masajista también se preocupa por la presión abdominal sobre el bazo y la vejiga, pues el primero es importante para el sistema inmunológico, y el segundo para la eliminación de las toxinas que el drenaje generará.
Después de un masaje linfático, siempre es importante tomar mucha agua, pues las toxinas son llevadas a través de la sangre a los riñones; éstos requieren de al menos dos litros de agua para poder eliminar las toxinas acumuladas.
Es mejor no tomarla toda a un mismo tiempo, sino seguir tomando con regularidad a lo largo del día. También es importante evitar la sal y el alcohol, pus limitan la capacidad de eliminación del cuerpo.
Objetivos del tratamiento:
• Aumentar la función del retorno venoso y reducir la estasis capilo-venicular
• Aumentar la velocidad circulatoria, venosa y linfática
• Aumentar la permeabilidad capilar linfática y mejorar la atonía vascular
• Reducir los edemas
Consejos prácticos del Drenaje Linfático Manual:
• Ritmo lento de las maniobras
• Paciente relajado, se recomienda que luego de que la persona este relajada, se flexionen ambas rodillas y caderas de modo tal que los músculos rectos abdominales se relajen y que el sujeto pueda respirar profundamente, esto favorecera el retorno linfático por el trabajo hidraulico del diafragma y además mejorará el retorno venoso
• Los tiempos son de: 20 min en rostro, de 30min a 40 min en MMSS o MMII, un drenaje linfático manual completo dura alrededor de 2 horas
• No es necesario utilizar medio deslizante
Indicaciones del Drenaje Linfático Manual
El drenaje linfático manual ha demostrado ser un gran auxiliar en el tratamiento de sinusitis, linfedema, artritis reumatoide, acné, ojos cansados y venas varicosas. Ayuda a acelerar la sanación de fracturas, ligamentos dañados, quemaduras, cicatrización de heridas y padecimientos post operatorios.
Un linfedema es uno de los padecimientos más comunes relacionados con un mal funcionamiento del sistema linfático. Consiste en la inflamación de un ganglio linfático ocasionado por la incapacidad de éste para drenarse solo, normalmente por una infección, una lesión o un tumor bloqueando el ganglio.
El linfedema no es un problema menor, pues dificulta la capacidad del cuerpo para lidiar con problemas en el sistema inmunológico, y provoca que infecciones menores se agraven, o que viejos padecimientos regresen, como el caso del herpes.
Se tratan linfedemas de tipo:
• Por obstrucción linfática
• Post Traumáticos y post quirúrgicos (por ejemplo en pacientes post mastectomizadas)
• De origen reumático
• Por estasis venosa o post trombotico
• Post infeccioso
• Dermatológico
• Post radiación
• Por metástasis (Linfedema Maligno)
• Por quemaduras
• Linfedema esencial (Enfermedad de Molroy)
• Linfedema congénito
• Alérgico
En estética:
El drenaje linfático manual se utiliza en estética para combatir situaciones como:
• Limpieza de la piel en profundidad
• Acné
• Arrugas
• Bolsas debajo de los ojos
• Perdida de cabello
• Busto Celulitis
• Piernas pesadas
• Manos arrugadas
• Antiestrés
Contraindicaciones del Drenaje Linfático Manual
• Infarto del Miocardio
• Angina de Pecho
• Edema por insuficiencia cardiaca descompensada
• Tumores malignos
• Hipo o Hipertensión severa
• Hipertiroidismo
• Zona purulenta o supurante
• Enfermedades de la piel
• Edema Nefrótico
• Infecciones Agudas
• Fiebre
• Flebitis, trombosis, tromboflebitis |